2. Avicena (980-1037)

Escribió muchas obras, pero las más célebres son las de comentario a las de Aristóteles. Dividió la filosofía en 3 partes: a) propedéutica –lógica–, b) teórica –metafísica, matemáticas y física–, y c) práctica –ética, economía y política–. La teología está unida a la metafísica. Escribió muchísimas obras, entre las que cabe mencionar El libro del saber, además de sus Comentarios a las obras de Aristóteles, como la Metafísica, y en especial su De anima.

a) Mundo. Se divide en 2 partes: la celeste y la terrestre, en cuyas divisiones sigue a Al-farabí, solo que identifica las inteligencias con los ángeles, defiende el ‘hilemorfismo universal’ e identifica el intelecto agente con San Gabriel.

b) Hombre. Compuesto de alma y cuerpo. El alma es una sustancia incorpórea, inmortal, que se conoce a sí misma y al resto por la recepción de formas del Intelecto agente. El alma es acto del cuerpo, que se une a él por amistad y de modo transitorio. El alma a veces está en potencia y otras en acto. El cuerpo es instrumento del alma.

c) Dios. Es ser necesario, creador, causa de todo, acto puro, simple, perfecto, inmutable, completamente trascendente, y por eso inefable: conocemos más lo que no es que lo que es. Su existencia se demuestra ‘a priori’ partiendo de las nociones de ‘ser necesario’ y ‘ser contingente’. En Dios se identifican esencia y existencia. En los demás seres la esencia es posible y la existencia es un accidente sobrevenido. Todo los seres emanan de Dios.