LA FILOSOFÍA EN SU HISTORIA (J.F. SELLÉS)

5. El Círculo de Viena: R. Carnap. El Neopositivismo lógico: Ch. Morris

Estas escuelas filosóficas están ceñidas al análisis del lenguaje. La primera tiene sus precedentes en M. Schlick, H. Reichenbach, A.J. Ayer y O. Neurath, pero fue Carnap el más celebre de la escuela en este escenario europeo. Por su parte, Morris encabeza la lista del neopositivismo lógico en América. Tras ellos destacaron otros: en Estados Unidos, Stevenson, Malcom y Quine; en Cambridge, J. Wisdom; en Oxford Ryle, J.L. Austin, PF. Strawson, etc., de algunos de los cuales nos haremos eco en el siguiente epígrafe. La fuente de todos ellos se puede buscar en Brentrano, en la medida en que éste sostiene que el sujeto es empírico, pues estas escuelas defienden que solo existe lo real singular, la sustancia como punto fáctico, lo cual permite decir que tienen por padre a Ockham. Se distinguen de éste en la tendencia al cálculo lógico del lenguaje. Para todos ellos el uso del lenguaje son las reglas, y éstas son ‘fictae’ (como en el nominalismo de Ockham), pues afirman que no cabe un sistema, sino solo ficciones. Como se puede advertir, en este neomaterialismo también se aprecia el rechazo al sistema hegeliano.

5.1) El Círculo de Viena: R. Carnap. a) Vida y obras. De ascendencia judía nació en Ronsdorf (Alemania). Tras la muerte de su padre, cuando él contaba con siete años, la familia se trasladó a Barmen, donde él cursó el bachillerato. Cuando tenía 18 se trasladó a Jena donde ingresó en la universidad; más tarde, en la de Friburgo. Participó en la Iª Guerra Mundial. Estudió matemáticas, física y filosofía. Se doctoró en Jena a sus 30 años. Fue profesor en la Universidad de Viena a los 40, y más tarde en las de Praga y Varsovia. Con el dominio nazi se trasladó a la Universidad de Chicago en América, pasando luego a las de Harvard, Princeton, y Los Ángeles. Se casó dos veces. Murió a los 79 años. Leyó a Kant, Haeckel, Ostwald, Frege, Russell, Reichenbach, Sclichk, Tarski, Neurath, Morris, Hilbert, etc. Sus obras son muchas: La estructura lógica del mundo, Pseudoproblemas de filosofía, Sintaxis lógica del lenguaje, La concepción científica del mundo, Filosofía y sintaxis lógica, Fundamentos de lógica y matemáticas, etc. Fue educado desde niño en la religión cristiana. Pero en el bachillerato se apartó de ella hasta perder la fe e incurrir, primero en un panteísmo, y luego en un monismo naturalista. Afirmó que la teología se resuelve en mito.

b) Filosofía. Es una construcción lógica (logicismo), pues estima que la mente ‘construye’ los conceptos-objetos, los cuales se corresponden –como decía Russell– con la realidad meramente empírica (empirismo). El cometido de la lógica es ordenar las relaciones entre tales objetos. Distingue cuatro tipos de objetos: los psíquicos propios, los psíquicos de los demás, los físicos y los socioculturales. Reduce lo psíquico a lo físico cerebral, y el yo a procesos psíquicos. La filosofía se reduce a análisis lógico del lenguaje (el cual es un sistema de reglas para hablar), es decir, la filosofía es análisis de las proposiciones de la ciencia empírica. Consideró la matemática como parte de la lógica. Sostuvo que la verdad se rige por el principio de verificación. Por tanto, afirmó que la metafísica, por inverificable, carece de sentido. El único sentido que tiene es el emotivo, es decir, como expresión de deseos humanos. Defendió que ‘toda ciencia se convierte en física’, ya que, en rigor, solo existen los hechos físicos, corpóreos, pues los psíquicos (como admite el behaviorismo) también lo son. Por otra parte, Carnap denunció la situación de Kulturkrisis aumentada sobre todo por el nazismo. Señaló que no sabemos por qué actuamos y si lo averiguamos descubrimos un sin sentido, del que surge el pesimismo.

5.2) El Neopositivismo lógico: Ch. Morris. a) Vida y obras. Nació en Denver en 1901-3. Se graduó en Ingeniería en Northwestern University. Defendió el doctorado en filosofía en la Universidad de Chicago en 1925. Enseñó en Rice University entre 1925-31 y a partir de esa fecha, en la de Chicago hasta 1959, año a partir del cual trabajó en la de Florida. Murió en 1979. Leyó a Nietzsche, Freud, Russell, Peirce, Dewey, Mead, James, Carnap, Cassirer, etc. Sus obras más relevantes son: Simbolismo y realidad: un estudio de la naturaleza de la mente, Seis teorías de la mente, Positivismo lógico, pragmatismo y empirismo científico, Fundamentos de la teoría de los signos, Signos, lenguaje y conducta, El alma abierta, La significación y lo significativo, etc.

b) Filosofía. Su análisis del lenguaje o semiótica la incluye en la teoría general de los signos, y en ella es proclive al pragmatismo, es decir, a una interpretación conductista de los mismos, o sea, entendiendo al signo según las reglas del comportamiento. Divide la semiótica en tres partes: a) semántica o relación de los signos con los objetos que designan; b) pragmática o relación de los signos con los intérpretes; c) sintaxis o estudio de las relaciones entre signos. Lo que precede le lleva a entender el lenguaje como respuesta conductual –a modo de reflejo condicionado– a un estímulo, y ello dentro de un grupo intersubjetivo de intérpretes. Los signos significan en directo los conceptos, no las cosas reales, y permiten que los intérpretes conciban los objetos.