4. Historia de la filosofía o Filosofía de la historia

Según Hegel, la filosofía se ha desarrollado históricamente hasta su culminación en su tiempo con él mismo. Ese desarrollo tiene en el autor varias exposiciones, pero la posterior pertenece a la última gran obra hegeliana: Lecciones sobre la historia de la filosofía. En ella dice que las ideas filosóficas han progresado según el método dialéctico, mediante el cual se manifiesta progresivamente la Idea. En consecuencia, Hegel pensaba que la historia es un proceso necesario, no libre, en el que tanto los sujetos como los sistemas filosóficos se pliegan a los requerimientos lógicos de la Idea. Si el desarrollo va de lo imperfecto a lo perfecto, la de Hegel es la última y más perfecta forma de filosofía, siendo todas las precedentes momentos parciales de esta verdad completa; a la par, las formas culturales y religiosas han sido manifestaciones de las diversas filosofías.

Divide la historia de la filosofía occidental en tres épocas: antigua, media y moderna. La antigua comienza con la griega, pues considera que los demás pueblos, los orientales por ejemplo, no tuvieron filosofía, sino una forma de saber inferior a ella. Los cambios son dialécticos: por ejemplo, Parménides concibió al absoluto como ser; Heráclito, como devenir; Platón y Aristóteles intentaron la unión del ser y devenir en el acto del Dios trascendente; pero fue el cristianismo quien resolvió dicha unión con el modelo del Dios trinitario ‘inmanente’. Por su parte, los filósofos medievales tuvieron visiones parciales que fueron aglutinadas por la visión del máximo de San Anselmo. En la filosofía moderna el énfasis en lo particular de los empiristas contrastó con el afán de generalización y sistema de los racionalistas, que ha tomado la recta final con Kant, en su tesis sobre la conciencia general, y con Ficthe y Schelling, que identifican esa conciencia con la autoconciencia infinita, hasta llegar así a la meta hegeliana, filosofía en la que la Idea es contemplada en su necesidad y verdad total, viendo los esfuerzos del espíritu absoluto a través de los siglos. Con Hegel ‘queda así cerrada la historia de la filosofía’. Dicho con sus propias palabras: ‘El resultado de la historia de la filosofía es éste. Primero, que no ha existido en todo tiempo más que una filosofía, cuyas diferencias coexistentes representan otros tantos aspectos necesarios de un solo principio. Segundo, que la secuencia de los sistemas filosóficos no es una sucesión fortuita, sino la sucesión necesaria… Tercero, que la filosofía final de una época es el resultado de esta evolución y la verdad, en la forma más alta, que alcanza la conciencia de sí del espíritu. La filosofía última contiene, pues, a las anteriores, resume dentro de sí todas las anteriores, es el producto y el resultado de todas las que le preceden’.