LA FILOSOFÍA EN SU HISTORIA (J.F. SELLÉS)

3. La neoescolástica de E. Gilson

Este movimiento filosófico cuenta con muchos representantes tanto en el siglo XIX –G. Sanseverino, Z. González, Th.M. Zigliara, J. Keutgen, J. Gredt–. como del siglo XX –J. Urráburu, J. Mercier, A.D. Sertillanges, M. Ramírez, J. Jolivet, P. Siwek, O. Lottin, F.Ch. Copleston, R. McInerny–. Pero atenderemos en exclusiva a uno de los más representativos: E. Gilson.

3.1. Vida y obra. Nació en París en 1884; estudió filosofía en La Sorbona, donde obtuvo el doctorado a sus 29 años, edad en la que comenzó su magisterio en Lille. Fue soldado en la Iª Gran Guerra, en la que fue hecho prisionero. Al terminarla, enseñó dos años en la Universidad de Estrasburgo, tras los cuales pasó a La Sorbona, y a partir de los 48 años trabajó en el Colegio de Francia. También fue profesor en las universidades de Toronto, Aberdeen, Harvard, Virginia e Indiana. Murió en 1978 a sus 94 años. Leyó a muchos pensadores clásicos y modernos, pero se centró sobre todo en el estudio de los medievales (San Agustín, Abelardo, San Bernardo, San Buenaventura, S. Alberto Magno, Sto. Tomás de Aquino, Escoto, R. Bacon, Ockham, etc.). Sus obras historiográficas son muchas: La filosofía de la Edad Media, La filosofía de San Buenaventura, El tomismo, Juan Duns Scoto, El espíritu de la filosofía medieval, El ser y la esencia, El ser y los filósofos, El ser y Dios… Cuenta también con una Historia de la filosofía (I de Descartes a Kant; II de Hegel a hoy), y con otras obras teóricas como: Elementos de filosofía cristiana, El amor a la sabiduría, El realismo metódico, La unidad de la experiencia filosófica y Realismo tomista y crítica del conocimiento. De familia y educación cristiana, siempre profesó en el catolicismo.

3.2. Filosofía. Gilson es, en primer lugar, un historiador de la filosofía medieval; en segundo, un defensor de la ‘filosofía cristiana’; en tercero, un defensor del realismo escolástico frente a la filosofía moderna que comienza con Descartes; y en cuarto, un defensor de la distinción real tomista entre ser y esencia. a) Filosofía medieval. Defendió que los dos pensadores medievales más relevantes son San Buenaventura, que siguió a San Agustín, y Sto. Tomás de Aquino, que siguió a Aristóteles. b) Filosofía cristiana. Sostuvo que ésta tiene una unidad debido a las verdades que han ido descubriendo sus diversos representantes a lo largo de los siglos, por lo que se puede llamar filosofía perenne. Tales verdades son racionales, pero se han descubierto gracias a la ayuda de la revelación cristiana. La mejor expresión de tal filosofía es el tomismo. c) Realismo escolástico. Mantuvo que esta filosofía es realista porque se basa en el ser, y desde él pasa al conocimiento, mientras que la filosofía moderna es subjetivista pues se basa en el sujeto y desde éste no se puede pasar al ser (‘ad esse ad nosse valet consequentia; ad nosse ad esse non valet consequentia’). d) Distinción real. Defendió la superioridad del acto de ser sobre la esencia en toda realidad creada frente a quienes no admiten o tergiversan esa distinción real (Avicena, Escoto, Suárez, Descartes, Wolff, Kant, Hegel, etc.), así como su identidad en el ser divino.